Los Centros de Justicia para las Mujeres nacen como una necesidad ante la prevalencia de la violencia en contra de las mujeres que se vive en México. Se instaura como una política pública de prioridad nacional del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, ejecutado por el Centro Nacional de Prevención del Delito y Participación Ciudadana.
Los Centros de Justicia para las Mujeres de Tuxtla Gutiérrez, Tapachula y San Cristóbal de las Casas (CEJUM), operan mediante la suscripción del Convenio marco de colaboración y coordinación entre diversas instancias estratégicas, tanto institucionales como de la sociedad civil, que convergen y se articulan bajo un mismo techo; siendo espacios de incidencia en la prevención, atención, sanción y erradicación de la violencia contra las mujeres. En éstos se brinda atención integral especializada a mujeres víctimas de violencia de género, y en su caso, a sus hijas e hijos con enfoque diferencial, de derechos humanos y perspectiva de género.
Estamos convencidas de que las políticas públicas integrales son necesarias para reducir y eliminar las brechas de desigualdad históricas que existen entre los géneros; abonamos desde estos espacios institucionales para cambiar la realidad de miles de mujeres, adolescentes, niñas y niños en el estado.
Somos una institución que, desde la perspectiva de género y enfoque de derechos humanos, facilita el acceso a la justicia y a la prevención de los factores de riesgo de violencia hacia las mujeres, adolescentes, niñas, adultas mayores, migrantes, discapacitadas e indígenas; logrando mayor seguridad para ellas y sus hijas e hijos, con el apoyo de una Red de Colaboración tanto interna como externa que favorezca su fortalecimiento e inclusión social.
Ser una institución reconocida a nivel estatal y nacional en el diseño y aplicación de estrategias efectivas e innovadoras de prevención, atención y erradicación de la violencia contra las mujeres.
Brindar servicios de atención interinstitucionales, personalizados, especializados, integrales y con criterios unificados que ofrezcan alternativas de solución a las mujeres que viven violencia, y en su caso, a sus hijas e hijos.